Por Karen Moe
Traducción al Español Sara Andraca Osornio
¿Por qué la mayoría de mexicanos estaban eufóricos
sobre la re-elección de una administración que es considerada una dictadura a la tradición de Venezuela? ¿Por qué la palabra ‘populista’ (haciendo referencia a un líder político que apoya al ciudadano promedio sobre la elite) es persistentemente lanzada en los medios, como una especie de papa caliente condenatoria? Aunque la historia política de México es más que complicada, la razón de que la mayoría de mexicanos estén felices es bastante simple: los gritos neoliberales de “¡Dictadura! ¡México es la nueva Venezuela! ¡Estamos perdiendo nuestra democracia! ¡Populista! ¡Populista! ¡Populista!” son guiados por ideología en vez de por la realidad vivida por millones de mexicanos.
El 2 de junio de 2024 México eligió no solo a su primer presidenta mujer, sino también una mujer presidenta de izquierda. Y, como es a menudo ignorado, claro que ser mujer no significa que estés comprometida con la justicia social, de la misma manera en que ser mujer no te hace feminista. No olvidemos a la infame Margaret Thatcher de los ochentas y a Christy Clark, la primera ministra de la Columbia Británica en los primeros 2000, ambas servidoras de intereses corporativos en la misma manera que sus conservadoras contrapartes masculinas. Sin embargo, Claudia Sheinbaum es la sucesora de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el controversial presidente que ha defendido a su país de la explotación neoliberal[i] y puso la atención del gobierno en el pueblo mexicano en vez de en las corporaciones internacionales que están siempre preparadas para el saqueo de un país plagado de corrupción y rico en recursos en lo que él llama “La cuarta transformación”, siendo las tres anteriores la Guerra Mexicana de Independencia de España, la Guerra de Reforma y la Revolución Mexicana. AMLO, el fundador del partido Morena,[ii] se enfrenta al epicentro neoliberal de los Estados Unidos y a todas las corporaciones internacionales para el mejoramiento de la vida del pueblo mexicano en su conjunto y Sheinbaum, pronto será el sedundo president de Morena, continuará lo que él ha empezado. Y sí, la mayoría de mexicanos que fueron ignorados durante los 71 años consecutivos de gobierno del ultra conservador PRI (1929- 2000) y después doce años de un PAN que de igual forma prioriza a las elites, seguido de otros seis años del PRI, no están solo felices, sino también aliviados.
3 de junio 2024 Ciudad de México, Reuters/Daniel Becarril Foto
Analizar las políticas de México con sus siglos de corrupción, empezando por los conquistadores españoles hasta la actual y voraz extracción corporativa de recursos, pasando por los cárteles de la droga, el ejército y el cuerpo policiaco, requeriría años de investigación profunda y no pretendo hacer eso. Un análisis tan extenso merecería un libro y no un mero ensayo. No obstante, guiada por la lógica de que el contexto es crucial para cualquier conclusión creíble, construiré en la medida de lo posible contexto que necesariamente se extiende más allá de las fronteras nacionales y más allá de la administración de izquierda, de tan solo seis años hasta el momento, que yo definiría como una combinación de socialismo y democracia (fue una elección libre donde ningún signo de corrupción ha sido encontrado, a diferencia de aquellas donde PRI y PAN resultaron victoriosos), lejos de la acusadora histeria de una ascendente, o ya realizada, dictadura comunista. Pero para algunos, como los norteamericanos republicanos, incluso un poco de centro-izquierda es estar al borde del apocalipsis.
La jerarquía colonial de México basada en el color de piel es flagrante
– incluso más que en Canadá o EUA, aunque no lo creas – Una significante anécdota de mis nueve años viviendo en la Ciudad de México es que nunca he visto ni una sola persona de piel blanca pidiendo dinero en la calle o recorriendo las áreas concurridas vendiéndote desesperadamente chicles o baratijas para poder comer. Viniendo de Vancouver, Canadá, donde las multitudes de gente sin hogar y con problemas de drogadicción en la calle son representativas de todas las razas, a menudo bromeo con que somos más equitativos con nuestra pobreza. En México, la mayoría de la población empobrecida es de piel oscura, descendientes directos de los indígenas colonizados; mientras que la mayor parte de aquellos que se oponen a Morena, los ‘fifís’ de Obrador (el apodo que le dio él mismo a su oposición), son predominantemente los mexicanos de piel clara, descendientes de los conquistadores españoles y, como uno de ellos me dijo una vez: “No soy como los mexicanos en el metro”. Como punto de referencia de la vida real, los mexicanos que Morena prioriza son aquellos que toman el transporte público. Los mexicanos con los que Morena está comprometido son estos, que han sido ignorados y explotados por los partidos de derecha como el PAN o el PRI y sus políticas neoliberales y su servicio a los EUA. Como Obrador ha proclamado en muchas ocasiones ante el apoyo de miles, “México no es una colonia de los EUA”. Morena ayuda y defiende al mexicano promedio, a la mayoría, y a México como Estado soberano. Y sí, la mayoría de mexicanos están muy felices por la promesa de otros seis años de Morena con Claudia Sheinbaum.
Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO)
El México que Obrador heredó después de 95 años de administraciones de derecha era virtualmente insondable en la extensión de su corrupción. Sin embargo, como todos los gobiernos que se disponen a limpiar la corrupción de sus predecesores, es imposible para un gobierno cumplir con todas sus promesas de campaña. De hecho, incluso en un país moderadamente corrupto en comparación, como Canadá, ninguna administración puede hacer todo lo que prometió y son siempre criticados por la oposición por no realizar lo imposible. Tal vez deberíamos cambiar el término a intenciones de campaña. A pesar de todas las críticas condenando a Obrador y a Morena por no hacer todo lo que dijeron que harían (uno podría agregar: aún), Obrador ha sido capaz de cumplir muchas de sus promesas en sus seis años de mandato que serán continuadas por Sheinbaum.
Durante la inauguración de AMLO en diciembre de 2018 – celebración a la cual asistieron alrededor de 150,000 personas, con la misma energía que la elección de Barack Obama – Obrador juró presidir un “cambio radical y profundo” que traería el “renacimiento de México”, en el cual “los pobres son primero” [iii]. En seguida se puso a trabajar su partido. Muy a pesar de las clases media y alta, una de las primeras cosas que hizo fue reducirle grasa, por así decirlo, a la alguna vez inflamada burocracia de México, implementando duras medidas de austeridad a burócratas y políticos. Redujo su propio salario a la mitad, convirtió simbólicamente a Los Pinos (la mansión presidencial) en un centro cultural para la gente y se deshizo del jet presidencial[iv]. El dinero reunido ha sido usado para financiar programas sociales.
“¿Cuáles programas sociales?” contestan abruptamente los Fifís.
“Solo le da dinero a la gente pobre para que vote por él”. Un argumento tan reduccionista ignora completamente la integridad transformativa de los programas sociales como Jóvenes construyendo el futuro (donde el Estado paga la mitad del salario del primer empleo de una persona joven), cheques bimestrales para las mamás solteras trabajadoras, personas discapacitadas y de la tercera edad (debe señalarse que hemos hecho esto en Canadá por décadas, como también en Europa occidental, y son alabados por ello)[v]. En la cara de la histórica disparidad entre el tener y no tener en México, Obrador va más allá de la implementación de programas sociales y trabaja para incluir la seguridad social en la Constitución para que no pueda ser erradicado fácilmente si un gobierno de derecha, complaciente de las elites, oprime a la mayoría del pueblo otra vez.[vi] Sin embargo, en las mentes de los Fifís, añadir justicia social a la Constitución menoscaba la democracia.
Sin importar las críticas que afirman que a la gente solo le agrada Obrador porque les da dinero, si uno se extiende de la administración de Obrador más allá del límite temporal de su elección en 2018, estas legislaciones apoyan a la gente más vulnerable del país a largo plazo y son un afilado contraste con la literal compra de votos con unos cuantos pesos y comida justo antes y durante la campaña de elección, como ha sido practicado por el PRI.[vii] No hay comparación entre la compra de votos con limosna que gente desesperada aceptará precisamente porque están desesperados, y la implementación a largo plazo y, crucemos los dedos, un bienestar constitucionalmente inscrito para la mayoría de mexicanos.
Para continuar con la acusación repetida ad nauseam de la elite
de que los pobres solo votan por Morena porque se les da un apoyo económico: sí, la mayoría de los simpatizantes son aquellos que fueron ignorados por siglos y ahora están siendo reconocidos y valorados a través de programas sociales, educación y oportunidades de empleo; no obstante, la extensión del apoyo a Morena abarca todas las clases donde el 50% de aquellos con el más alto nivel de ingresos votaron por Claudia Sheinbaum. Uno solo tiene que investigar un poco más profundo de las habladurías ideológicas para encontrar todos los huecos en la retórica elitista fifí.
Lo que sigue son los desgloses de los porcentajes de votantes por ingreso y ocupación: el primero muestra el ingreso mensual (10,000 pesos, aproximadamente 750 dólares canadienses).
El segundo muestra la ocupación en el orden de ama de casa, pensionado, trabajador por cuenta propia, campesino/jornalero, profesor o maestro, trabajador del sector privado, no sabe, estudiante, trabajador del Estado, profesional independiente, desempleado, patrón o empleador.
Para enlistar algunas otras terribles cosas que Obrador ha hecho:
Él ha duplicado el salario mínimo y ha estimulado el empleo. El desempleo está en su récord más bajo actualmente. Y, maldito sea, está planeando extender la democracia al poder judicial para que ahora los jueces sean elegidos por voto popular en vez de nombramientos y nepotismo. Yo me pregunto, a menudo atónita por la ceguera a la que conduce la ideología del fifí de elite (o los “wannabis”, como también son llamados): ¿qué hay de malo en ayudar a los ya ignorados pobres del país para que ahora puedan tener suficiente comida? ¿qué hay de malo en trabajar para dar a todos las mismas oportunidades? ¿qué podría estar mal con duplicar el salario mínimo y que el desempleo esté en su record mínimo? ¿No son todos estos avances lógicos de la civilización, por no decir de la humanidad? Proclamaciones histéricas en contra de lo que son legislaciones de democracia social y no un país descendiendo vertiginosamente, desapercibido, hacia el comunismo donde, un fifí totalmente enojado proclamó en Facebook que “por un apoyo monetario, un tanque de agua o un techo de lámina [los pobres] comprarán su esclavitud” [ix], sería poco menos que estrafalario si no fueran tan ideológicamente predecibles. Suena más parecido a administraciones del PRI o el PAN; pero con ellos, el techo y el agua nunca estuvieron y nunca estarán incluidos. En palabras del abuelo indígena canadiense Bill Jones, de nuestro libro en proceso sobre opresión sistemática, la elite capitalista/colonialista siempre “protegerá su propio egoísmo” tergiversando lo positivo en grotesca farsa, mejor aún, exclamando que ningún bien se ha hecho en absoluto.
La mina Peñasquito en Zacatecas de propiedad canadiense.
Como canadiense y revolucionaria que se mudó a México en 2015,
estoy particularmente impresionada por el hecho de que, tan pronto tomó el cargo, Obrador empezó a reformar las regulaciones mineras, especialmente en relación con corporaciones extranjeras – de las cuales 70% tienen sede en Canadá. Durante la administración neoliberal que estaba antes, el daño ambiental y los impuestos eran pasados por alto. Uno de los muchos ejemplos del descuido y abuso del PRI y PAN sobre el pueblo mexicano es la contaminación con mercurio de tierras y aguas en estados como Zacatecas; este metal es usado para extraer plata y oro de las piedras, lo que obviamente envenena a los pobladores y tiene como resultado atrocidades tales como daño renal en niños. Desde el 2018, Obrador no solamente ha estado tomando medidas enérgicas en la tributación de corporaciones e incluso ido tan lejos como para añadir modificaciones en la Constitución sobre exoneraciones fiscales y excepciones para las industrias mineras internacionales, sino también ha estado obligando a las compañías mineras a limpiar sus desastres.[xi] Ahora bien, terminar con la contaminación del agua potable y, entre otras cosas, salvar a niños del daño renal[xii] no es reconocido por los oponentes de Morena como algo bueno, o algo siquiera.
Y luego están los cárteles. Sí,
se culpa al gobierno de Morena de no ser capaz de resolver el problema de los cárteles en seis años. ¿cómo le hace un gobierno, o cómo le haría cualquier gobierno para el caso, para milagrosamente borrar un pantano que es producto de décadas de corrupción interna y, tal vez aún más importante, intrínsecamente conectado a otra cultura? Una de las muchas cosas que amo sobre Obrador es que dice la verdad sobre porqué hay cárteles en primer lugar- razón por la cual hay un índice abrumador de homicidios en México, que ha estado en niveles similares desde que los cárteles existen. No solo dice la verdad, se la dice directamente a la fuente: a una despiadada cultura capitalista, individualista, basada en la codicia, despojada de empatía. ¿Lo adivinas? Sí, el hogar de la valiente tierra de la más grande y libre democracia capitalista en la Tierra: los EUA. En una conferencia en Puebla en 2017, tuve la alegría de escuchar a Noam Chomsky decir: “el principal problema de México es estar al lado de los EUA”. Y uno de los principales problemas en el principal problema de México es el hecho de que nosotros (me incluyo aquí siendo yo de la cultura canadiense, la cual, en este aspecto, es básicamente lo mismo que EUA) estamos infestados con familias disfuncionales precisamente porque, como Obrador dijo en una entrevista con 60 Minutos en marzo de 2024: carecemos de tradiciones – excepto la de acumular riqueza personal y consumismo, por supuesto- y la intimidad familiar es también inexistente. Citando nuevamente al abuelo Bill Jones: “es una práctica común para los norteamericanos conducir por campamentos urbanos de gente sin hogar, negando el hecho de que tienen familiares ahí”. Como Obrador expresó al presidente estadounidense, Joe Biden, de la manera más directa: “Ustedes no abrazan a sus hijos lo suficiente”. Después de eso fue ridiculizado de forma ignorante (por los fifís y el supuesto primer mundo) por esta declaración, ignorante porque, si uno realmente lo piensa, si uno piensa más allá del deseo histérico de estar picando agujeros con cualquier palo posible, es fundamentalmente cierto. Cuando la entrevistadora de 60 Minutos preguntó:
“¿No hay drogadictos en México?”
“Poco” contestó Obrador. Y en mis nueve años en el país, es absolutamente cierto. Poco. Solo unos cuantos, en comparación con los cientos de miles de personas con drogadicción en las calles de EUA y Canadá, distanciadas de sus familias y, sí, muy probablemente sin haber sido abrazados lo suficiente.
Una de las decenas de miles de jóvenes en situación de calle en Canadá, Vancouver BC. Foto: Dillon Hogan/CBC
Una de las decenas de miles de jóvenes en situación de calle generalmente con adicciones a las drogas en Canadá, Vancouver BC. Foto: Jason Payne
Y luego están las atrocidades de los asesinatos
de candidatos políticos y periodistas mexicanos. Reitero, en una nación plagada de crimen organizado, esto no es nuevo y, una vez más, es predominantemente producto de la violencia de los cárteles en colisión con el ejército, y el gobierno muy bien podría haberlo aminorado, pero definitivamente no ha incrementado si uno coloca los primeros seis años de Morena en el contexto de los últimos cien. Debajo de las generalizaciones histéricas de la oposición, es significativo que todos los asesinatos de candidatos políticos durante las elecciones de 2024 fueron municipales y – si uno suma 2+2- causados por la lucha entre cárteles para mantener el control de su territorio directo. No tendría que decirse que terminar o incluso controlar la dominación de los cárteles sobre el campo en México está lejos de ser fácil; no hay tal cosa como ¡presto, wah-la! México está limpio de crimen organizado. Como uno de muchos ejemplos, la mitad del estado de Michoacán es casi sinónimo del Salvaje Oeste. Es gobernado por el cártel. Me han contado que las playas de Michoacán son increíbles porque son vírgenes y están vacías. No hay un remedio instantáneo, no especialmente con el mercado de drogas en el norte y no especialmente cuando a nadie le importa notar o recordar el hecho de que no estaban bien las cosas antes de Obrador.
Lista de asesinatos de periodistas entre 2004-2022.
Para continuar construyendo contexto más allá de la administración de seis años,
las críticas a Obrador hacen sonar los asesinatos de periodistas en México como algo nuevo. Si casualmente una administración que está comprometida con la gente y no con priorizar las ganancias individuales de la elite, es acusada de ser responsable de esto, todo lo que uno tiene que hacer es buscar en Google “asesinatos de periodistas en México” y aparecerán: una lista de asesinatos que abarca décadas. Y, si uno también toma en cuenta el hecho de que PRI y PAN estuvieron en el poder por 95 años y Morena solo 6, podemos hacer la aritmética ideológica obligada. Otra vez, otra acusación vacía.
La agencia reportó 32,223 asesinatos de mexicanos desde enero hasta diciembre de 2022. Si bien es extremadamente alto, esto es una caída del 9.7 por ciento to respecto al año anterior, cuando 35,700 homicidios fueron registrados. También es la tasa de homicidios más baja desde 2017—cuando el crimen violento aumentó durante la ultima parte de la presidencia de Enrique Peña Nieto.
Sin embargo, si queremos adentrarnos en el meollo
del índice de asesinatos que es virtualmente imposible resolver a menos que el mercado de drogas en el norte de alguna manera desaparezca (lo cual requeriría una reestructuración cultural de la unidad familiar y de la empatía en países como Canadá y EUA)[xiv], la tasa de homicidios en el 2023 es más baja que la del último año de Peña Nieto en 2017 y ha ido disminuyendo desde el 2022. Escarba un poco por debajo de la histeria fifí y los huecos se encuentran fácilmente en sus intentos por estar picando todo de una administración con las mejores intenciones, milagrosamente logrando permanecer a flote en un pantano tóxico de individualismo y avaricia tanto dentro como fuera de sus fronteras nacionales. No obstante, como con la elección de Obrador en el 2018, con la elección de Claudia Sheinbaum y la re-elección de Morena, un espinaquer ha sido elevado de nuevo.
Junto con las burlas y los memes
hechos de la declaración cierta de Obrador sobre que las familias estadounidenses y canadienses no abrazan lo suficiente a sus hijos –lo que resulta en la plaga de familias disfuncionales y una cultura individualista carente de empatía, lo que resulta en la epidemia de gente con drogadicción en el supuesto primer mundo, lo que resulta en un porcentaje astronómico de asesinatos de mexicanos- está el Abrazos no Balazos de Obrador. Esta estrategia fue iniciada al inicio de su administración para abordar la fuente de la violencia de los cárteles en vez de continuar la inefectiva guerra contra el resultado; nacidos del círculo vicioso de miseria y violencia, los cárteles son monstruos a los que siempre les crecerá otra cabeza. Obrador aborda la pobreza y la falta de oportunidades en las comunidades más pobres de México. Confrontación directa con los cárteles es evitada y, en su lugar, son financiados programas de capacitación y becas para jóvenes vulnerables: los hombres jóvenes que son blanco para convertirse en soldados rasos del cártel. Eso es. Abrazos no Balazos va a las causas de raíz de la epidemia de distanciamiento familiar y la subsecuente epidemia de drogadicción y sobredosis. Abrazos no Balazos, en perspectiva, es pensar a largo plazo. Los EUA y Canadá necesitan aprender de esto en vez de condenarlo.
Abrazos no Balazos es una versión nacional de una organización comunitaria que visité en 2017 en los barrios de Monterrey, Nacidos para Triunfar (NPT). Fundado por Juan Pablo García Aguiñaga, NPT es una organización sin fines de lucro para hombres jóvenes que han sido liberados de los barrios empobrecidos y los cárteles. Como Abrazos no Balazos, NPT ofrece a los jóvenes educación y oportunidades laborales para escapar de la tentación –o necesidad- de unirse a un cártel porque no tienen otras opciones. Nacidos para Triunfar ha sido muy exitoso.
Mural de Nacidos para Triunfar, Monterrey, México. Foto: Karen Moe.
Empero, ¿está funcionando Abrazos no Balazos? Es difícil decirlo. 100%. Solo ha estado en funcionamiento por seis años. Tales experimentos sociales requieren años, incluso décadas, para tener un efecto discernible a escala nacional, especialmente cuando es medida en contraste con los números de soldados rasos requeridos por organizaciones clandestinas y hambrientas como los cárteles de droga. Una cosa es certera: de acuerdo con el autor y profesor de la UNAM, Arturo Ramírez, “[Abrazos no Balazos] ha cambiado la narrativa de la guerra a una enfocada en las causas, [pero] todavía necesita penetrar en las afectadas masas a mayor profundidad”.
Como terminar con el daño renal en niños,
no tendría que decirse que financiar programas para jóvenes desfavorecidos no puede ser nunca una cosa mala, como con los esfuerzos de Nacidos para Triunfar, algunos jóvenes que se han inscrito en programas de Abrazos no Balazos en estos seis años han sido beneficiados sin duda. Desde el 2011 al 2017, se graduaron 250 integrantes del “programa formativo de educación” de Nacidos para Triunfar.[xvi] Como AMLO ha declarado y como Juan Pablo García Aguiñaga sabe de primera mano, con el tiempo, llegando a la raíz, la pobreza, la falta de oportunidades, funciona.
Los cuerpos de 13 hombres que tenían las manos atadas antes de ser ejecutados en un campo en Sinaloa, México 2008.
¿Puede atribuirse a Abrazos no Balazos el decline en el índice de asesinatos en los últimos dos años de administración de AMLO? Una vez más, es difícil asegurarlo aún al 100% de una forma u otra. Puede ser. Si menos jóvenes en los barrios son reclutados por los cárteles eso equivaldría a menos cárteles, carne de cañón para las guerras de territorio. Si los jóvenes tienen otras oportunidades además de aspirar a ser capos de la droga, tal vez habrá menos cárteles y el mercado de droga estadounidense y canadiense tendría que alimentarse a sí mismo. Como Obrador declaró en la entrevista para 60 Minutos después de que México fuera culpado (otra vez) de la epidemia de fentanilo en EUA: hay bastantes laboratorios de fentanilo en EUA (y yo añadiría a Canadá). Todo lo que tienes que hacer es pedir los ingredientes desde China y ellos pueden construir un laboratorio.[xvii] Con Abrazos no Balazos, Obrador se ha atrevido a diferentes tácticas y tomará mucho más que su administración para ver resultados definitivos. Sin embargo, lo que es innegable es que los cárteles siempre estarán pescando en los barrios en busca de soldados rasos y siempre habrá asesinatos de mexicanos mientras haya un mercado de drogas voraz en el norte y mientras no haya otras oportunidades para hombres jóvenes marginados. Los EUA y Canadá necesitan llegar a la fuente también y EUA necesita dejar de culpar a México por las muertes de sus jóvenes de las cuales su cultura es principalmente responsable.
Photo: Daniel Aguilar/Reuters 2007
Como siempre, los EUA quieren entrometerse
y la mejor excusa para esto es declarar que Obrador es “amigo” de los cárteles porque está evitando confrontación directa con ellos. En un artículo de The Texas Policy Foundation, el presidente “autócrata” [xviii] de México es culpado de matar estadounidenses “en sus propios hogares y comunidades” y, por lo tanto, el ejército estadounidense tiene el derecho de invadir México y poner fin a esto ellos mismos porque Obrador el autócrata se pone del lado de los cárteles terroristas. AMLO responde en su irreverente y refrescante estilo:
“Se habla en los Estados Unidos… de intervenir y confrontar al crimen organizado, a narcotraficantes, tratarlos como terroristas y es por esta razón que ellos vendrán a ‘ayudarnos’, a ‘apoyarnos’ en contra del crimen organizado…no aceptamos ninguna intervención… si lo hacen, no solo los marinos y soldados defenderán México, sino que todos los mexicanos defenderán México."[xix]
Esta declaración no significa que AMLO se pone de lado de los cárteles. ‘Si uno lo explica, veremos que lo que él está diciendo es que los EUA no tienen invitación para invadir su país. Significa que él rechaza totalmente la actitud típicamente condescendiente de EUA sobre que México necesita su “ayuda” y “apoyo” y que los cárteles mexicanos sean “terroristas” –este término se ha vuelto muy activo en la conciencia y jerga coloquial de los estadounidenses después del 11 de septiembre. Los cárteles no son aviones estrellándose contra el World Trade Center; en su lugar, están alimentando oportunistamente una enfermedad interna de la cultura norteamericana porque esto ha sido la principal oportunidad para jóvenes empobrecidos en México y, sí, es extremadamente redituable. Lo que esta afirmación significa realmente es que México no tolerará una invasión de EUA en su estado soberano y que México, a diferencia de administraciones neoliberales que gobernaron al país por casi un siglo antes que él, no es una colonia de EUA. Esto significa que México se hará cargo de sus asuntos internos como mejor considere y eso es lo que han estado haciendo.
Como con el embargo a Cuba (el cual de hecho sí fue un estado comunista), a una nación arrogante como los EUA no le gusta cuando le desobedecen. Y como una de las más grandes naciones capitalistas en el mundo, EUA hará lo que sea para demonizar cualquier atisbo de socialismo, especialmente en un país –como Cuba antes de la revolución con Fulgencio Batista cuando Cuba era literalmente la puta de Norteamérica- que han explotado económicamente por décadas, si no es que siglos y, más ofensivo aún, está justo en su puerta trasera y prosperando sin su “ayuda” interesada.
Y luego están las alegaciones capitalistas
(tanto nacional como internacionalmente) de que México de repente se ha convertido en un estado militarizado –implicando que no ha habido hombres con armas largas en las calles o dando vueltas sobre la caja de las camionetas militares antes del 2018. Debido a la complejidad de una nación infestada con tan extensas e intrincadas redes de crimen organizado y al hecho de que no crecí aquí ni estudié la universidad en México, ciertamente no pretendo ser una experta en la historia de las relaciones entre la policía, el ejército, el gobierno y los cárteles. Por lo tanto, consulté con Arturo Ramírez otra vez para conseguir algo de contexto más allá de la histeria de generalizaciones desinformadas.
Ramírez se remonta a la presidencia de Felipe Calderón (PAN) entre el 2006 y 2012,
quien implementó “la guerra contra las drogas” –término reveladoramente mimético con el estadounidense “War in drugs” e indudablemente lo que al gobierno de EUA le gustaría reafirmar: una guerra de ideas a corto-plazo y ego-maníaca. Ramírez explica cómo, debido a que Calderón necesitaba fortalecer su credibilidad después de una corrupta y controversial elección donde AMLO y Morena fueron los ganadores legítimos, él llevó el ejército a las calles y, junto con la entonces Policía Federal, terminaron siendo dos fuerzas policiacas fuertemente armadas luchando con los cárteles. Esta guerra duró seis años, y la fuerza de los cárteles incrementó porque, como Ramírez explica:
“El secretario de seguridad pública del presidente Calderón, Genaro García Luna, fue un negociador entre los grupos del tráfico de drogas y los líderes con poder económico y político. García Luna está en prisión en EUA por esto, y el presidente Calderón está exiliado del país debido a fuertes sospechas de haber colaborado con los cárteles”.
Nada cambió bajo el gobierno de Peña Nieto (2012-2018) pues se llegó a un punto muerto entre el ejército y el gobierno, y la guerra contra las drogas de Calderón continuó sin tregua. Sin embargo, con la elección de AMLO en 2018, el programa de Abrazos no Balazos empezó a aminorar el yugo de los cárteles y a detener la “guerra frontal” y, en su lugar, poner en la mira lo que yace por debajo de lo que en ese momento era ya un conflicto interno de doce años, que podía considerarse una guerra civil legislada gubernamentalmente. Ramírez continúa contextualizando:
“AMLO heredó al ejército en las calles y regresarlo a los cuarteles tendrá que ser una acción en fases de pactos políticos. Uno de ellos fue darle al ejército una función más constructiva, no destructiva: ellos construyeron el aeropuerto de Tulum, el tren Maya, miles de unidades de salud, escuelas, estructuras estratégicas en caminos, y en generación de electricidad. Además, AMLO construyó una nueva fuerza policiaca: la Guardia Nacional, de estilo militar, pero con un civil al mando.”
Las acusaciones de una abierta militarización contra AMLO son, en palabras de Ramírez, “conjeturas que la CIA ha creado porque AMLO ha limitado su acción e influencia en México”. Por consiguiente, estas acusaciones pueden ser sintetizadas de esta manera: todo lo que Morena ha hecho bajo el mandato de Obrador y que continuará bajo el liderazgo de Sheinbaum será demonizado por la oposición tanto nacional como internacional incluso si se trata de trabajar para quitar un ejército desmedido de las calles y usar esa fuerza de trabajo para construir infraestructura nacional, terminar lo que pudo haber bien sido legislado como guerra civil y dar a los niños sin otra opción que ser reclutados por los cárteles otras opciones. Y, de hecho, con EUA amenazando con invadir México y arrogantemente interferir en los asuntos internos de un estado soberano, la necesidad de una guardia nacional no es infundada.
Estas son todas, indudablemente, buenas cosas.
*
Continuará…
Mantente al tanto para la Parte Dos y el contexto de las controversias con el tren Maya, infraestructura de la que nadie habla, el medio ambiente, feminismo, Venezuela y fifís comiendo helado.
Presidenta Claudia Sheinbaum
NOTAS:
[i] Neoliberalismo: acercamiento político que favorece el capitalismo de libre mercado, sin regulación (piensa que los capitalistas mandan y hay cero programas sociales), y reducción en gastos gubernamentales (piensa en que no hay redes comunitarias ni programas sociales). Una ideología de ojo por ojo/ perro come perro, de individualismo, prepotencia, avaricia sin empatía que se ha normalizado a sí misma, es económica e ideológicamente imperialista (piensa en: colonialismo corporativo). Mi definición: capitalismo, pero en crack.
[ii] Morena significa mujer de piel oscura.
[x] No solo el 70% de las mineras tienen su base en Canadá, sino también muchas se niegan a pagar impuestos al gobierno mexicano y prohíben a trabajadores mexicanos sindicalizarse. Algunas mineras canadienses incluso están yendo tan lejos como para demandar a México por cobrarles impuestos. AMLO está peleando de vuelta. Checa algunos de los muchos artículos aquí:
https://jacobin.com/2021/05/canada-mining-industry-justin-trudeau; https://www.theglobeandmail.com/business/article-mexican-president-pressures-canadian-miner-in-simmering-tax-dispute/; https://www.canadianminingjournal.com/featured-article/mining-operations-in-mexico/; https://www.theyucatantimes.com/2020/06/amlo-urges-canadian-mining-companies-to-pay-taxes/; https://mexiconewsdaily.com/news/amlo-asks-canada-to-persuade-mining-companies-to-pay-taxes/; https://canadians.org/analysis/canadian-mining-company-sue-mexico-isds/
[xi] Un reporte de abril de 2023 realizado por Covington & Burling LLP enlista algunas de las reformas a la ley mexicana de minería y la ley nacional de agua:
- Los aplicantes [de minería] deben cumplir con los requerimientos adicionales, incluyendo el cumplimiento de un estudio sobre impacto social, consultas públicas con comunidades afectadas, y el establecimiento de una compensación, un programa de clausura y post- clausura, así como un programa de manejo de desperdicios.
- Las concesiones mineras en áreas naturales protegidas, cuencas de agua protegidas, zonas marítimas y terrestres federales ya no serán autorizadas.
- Las concesiones mineras serán condicionadas a la disponibilidad de agua y a previas concesiones de agua. Esta disposición parece impactar proyectos mineros en el norte de México, donde la escasez de agua ha sido un problema prevaleciente y una preocupación mayor para el gobierno de López Obrador.
- Las concesiones mineras pueden ser revocadas debido a riesgos ecológicos inminentes o a daño ecológico irreversible o debido a la falta de reportes sobre riesgo y daño ambiental, permisos ambientales, títulos de concesión de aguas, programas de tratamiento de agua y programas de clausura.
- Sería un crimen menoscabar la seguridad física de trabajadores al no cumplir con las provisiones de la ley de minería y sus regulaciones. Esta medida parece proponerse para un posterior empoderamiento de los sindicatos en el sector minero y e impulsarlos por sobre las compañías mineras.
[xii] Checa mi artículo sobre la bienal de arte mexicano en Zacatecas para un análisis de las respuestas de artistas al comportamiento de mineras transnacionales y la impunidad ambiental. https://whitehotmagazine.com/articles/mexico-s-xlll-femsa-biennial/4092
[xiii]https://www.reuters.com/world/americas/mexican-candidate-assassinations-hit-grim-record-ahead-sundays-election-2024-06-01/; https://www.latimes.com/world-nation/story/2024-05-29/mexico-election-violence-cartel-killings-candidates
[xiv] Mucha de la violencia en México es atribuida a las disputas entre los cárteles de droga, los cuales han evolucionado también al secuestro, extorsión y otras formas de contrabando. https://apnews.com/article/mexico-homicides-rate-violence-d0a9a83c3124b1f3ce0e8af6c9b8aa9f
[xv]Gracias a Arturo por la información que me ha dado para ayudarme a llenar algunos huecos de información, inevitables al escarbar en la historia política de la corrupción.
[xviii] Si uno busca la definición de “autócrata” verá que, con los programas sociales que ha implementado para el mejoramiento de las vidas de la mayoría del pueblo mexicano, su popularidad y la de su partido, el uso de este término está completamente guiado por la ideología norteamericana reminiscente de la guerra fría.
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Sobre la escritora:
Karen Moe es una autora, crítica de arte, artista visual y del performance, y activista feminista. Su trabajo se centra en la violencia sistémica del patriarcado: ya sea por género, raza, clase, el ambiente o el especismo. Su crítica del arte ha sido publicada internacionalmente en revistas, antologías y catálogos de artistas en inglés y español, ha exhibido y performeado a través de Canadá, EUA y México y ha hablado de violencia sexual internacionalmente. Es autora de Víctima: el manifiesto feminista de una feroz superviviente con Vigilance Press (2022) el cual fue finalista en el Festival de Libro de San Francisco. Durante su gira por Norteamerica, fue premiada con el “Premio al Héroe del Año Ellie Liston” por la fiscalía del Condado de Ventura por ser esencial en la sentencia de cadena perpetua de un violador serial. Karen habla internacionalmente sobre violencia sexual, compartiendo sus experiencias vividas de “trauma y triunfo”.
Víctima ha sido traducido recientemente al español. Vive entre la ciudad de México y la isla de Vancouver, Canadá.
Sobre la traductora:
Sara Andraca Osornio es hispanista, traductora y profesora de inglés y español como lengua extranjera. Co-fundadora del Colectivo Solidario de Enseñanza de Lenguas (CSETL) y escritora, con experiencia en la traducción literaria.
Mural de Nacidos para Triunfar, Monterrey, México. Foto: Karen Moe.
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